¡Eres una Diosa!
¡Eres una Diosa!, acéptalo, acéptalo!
Mujer empoderada, mujer medicina, mujer sanadora, curandera , bruja, delicada, madre, victoriosa, emprendedora, maestra. Mujer sexo, sensual, sexista, feminista, machista, pero sobre todo bella. Mujer tienes que ser…
¿Tienes que ser?
¿Cuánto de estos títulos nos estamos tratando de poner, a pesar que ya nos hemos ganado el título de FUERTES, porque parimos, llevamos la casa, los hijos, el marido, el trabajo y más.
¿Cuánto de esto nos saca de nuestro centro intentado salir de lo que nos hicieron en épocas milenarias, donde la mujer tenía mas deberes que derechos, pasando de ser un objeto a una víctima, indefensa?
¿Cuánto de esto nos está condicionando para pasar de ser la víctima a ser la victimaria?
¿Quieres igualdad de condiciones, poniéndote por encima del hombre, siendo su ambulancia para que pueda quererte o quieres realmente ser amada y respetada, amando y respetando?
¿Mujer qué quieres, quieres realmente valorarte, pintándote los labios, operándote los pechos, o quieres valorarte simplemente haciendo lo que te gusta y ser quien realmente quieres ser?
¿Mujer qué quieres, quieres tener sexo seguro, pero no te importa ser la amante?
¿Mujer qué quieres? Quieres ser independiente pero no quieres que tus hijos lo sean, o tu marido, o tus padres o tus hermanos o amigos? Siendo la ambulancia de ellos?
Ser mujer no es bueno, ni es malo, es ser un HUMANO, no es ser humanoide, ni hombre, ni macho, ni niña, ni camión de carga y mucho menos ser la carga, haciéndote dependiente del marido.
Ser mujer es sentirte mujer, es ser la adulta, capaz de comprender, de amar, de sentir, de resolver y de vivir, de producir, de acompañar, de valorar, de dar, de nutrir.
Ser mujer es ser más que sí misma, no más que el hombre, ni querer ser hombre para poder imitarlo o despreciarlo o maltratarlo. Ni más que tu congénere porque le envidias entrando en competencia con ella que es tu hermana. Tu amiga, tu igual.
Mujer ¿quieres ser mujer?
Realmente quieres ser esa esencia femenina, llena también de lo masculino, pero sobre todo con equilibrio, con divinidad, con armonía. Mujer, pregúntate qué quieres ser, a dónde quieres ir, qué quieres realmente alcanzar para ti. Y respondiéndote eso contendrás la belleza que realmente tienes.
¡Eres una Diosa! ¡Eres una Diosa!, acéptalo, acéptalo!
Mujer, si estás pasando por una situación difícil o sientes que necesitas alguna ayuda no dudes en contactarme.